jueves, 20 de febrero de 2014

Ser niños.

¡ Engañame en tus juegos!, tan fácil como mirarme con tus grandes ojos cargados de infantil cariño, ¡engañame! así tendré la ocasión de oír tus palabras, de adivinar tus razones apenas ocultas en la catarata de tu loca conversación, dime cuanto quieras, el tiempo pasa de puntillas sin atreverse a decir la hora, llévame de tu mano en busca del alimento para las vecinas gallinas, su brusca voracidad acelera tu corazón y te refugias en mi, sabes mi pequeño que no pasarán y acabarás acariciándolas  mientras pican mi mano, tus pequeños paseos plagados de pequeñas aventuras que quizás contarás a quién quiera escuchar... ¡engañamé ! , me hace feliz tu alegría tras el temor de la realidad vivida, cuéntame tu vivencia ya que probablemente las gallinas sean dragones que se acercaron a conocerte, a quererte, dibujaremos lo que quieras, recortaremos lo que con tijera en mano haya que recortar...¡quedará mas chulo así!, verte feliz me hace sentir la vida en su plenitud... te veo caminar, sé que siempre tendrás unas manos que darán apoyo a tus pasos y cariño en sus abrazos, ¡engañame!, oiré tu risa, veré tus ojos... 

domingo, 16 de febrero de 2014

Viejas páginas.

Buscamos aquello que consideramos parte esencial de nuestra vida y casi siempre lo hacemos dentro de las reglas del estúpido juego de la vida social que nos aboca, una y otra vez, al profundo agujero de la negación de nuestro íntimo ser. Cada día que pasa recuerdo con más fuerza mis viejos ideales de paz, de amor y de lucha, me duele el ver donde quedaron los jirones de tantas cosas que consideré como irrenunciables y que pasado el tiempo..., un viejo reencuentro con el pasado, ninguna palabra sonó en nuestros ya viejos labios, solo una profunda mirada fue suficiente en el casual encuentro, sus niños, mis niños, solo recuerdos, recuerdos y más recuerdos, ningún deseo de clasificar lo que ya no volverá, existe la ilusión como alimento de nuestras vidas, la zanahoria en el extremo del palo, quizás estoy cansado de tantas mentiras que solo nos proporcionan daño, quizás ya no quiero pelear, quizás ya solo quiero el cariño de un niño que escuche mis viejas historias, quizás estoy gritando el miedo al silencio, al eco del vacío, a la simple nada y volveré a besar la fría piedra del recuerdo, de la ausencia presente, sonreiré a la vida, la larga noche dejará un rayo de luna en mi almohada y sabré que no camino solo, mi vida, solos tu y yo.

jueves, 6 de febrero de 2014

Fe de vida.

Sé que el invierno está aquí
detrás de esa puerta. Sé
que si ahora saliese fuera
lo hallaría todo muerto,
luchando por renacer.
Sé que si busco una rama
no la encontraré.
Sé que si busco una mano
que me salve del olvido
no la encontraré.
Sé que si busco al que fui
no lo encontraré.
Pero estoy aquí. Me muevo,
vivo.
Nada en orden. Todo roto,
a punto de ya no ser.
Pero toco la alegría,
porque aunque todo esté muerto
yo aun estoy vivo y lo sé.
                      JOSE HIERRO.

¿El tres?.

Dicen que el tres, yo creo que es mejor el cuatro ya que el día caminaba raudo hacia la noche y en determinadas horas mejor esperar al día siguiente ya que entre que se lo termina uno de creer, pues todo ha terminado bien, pues no teta con gana y cagar no caga pues en fin que ya estamos en el día cuatro con la alegría del eterno milagro de la vida.
La llegada de un nuevo ser significa tanto que es muy difícil comentar lo que sentimos, sin apenas darnos cuenta nos erigimos en defensores de esa nueva vida que ha dejado de ser querida esperanza..., te imagino correteando, escucho tu voz e imagino tus palabras, tus juegos serán alegría y tus pesares los haremos nuestros, tu sonrisa nos dirá del cariño de quienes te engendraron, ellos guiarán tus pasos en la segura senda y modelaran tus firmes sentimientos, ser padres, la plena realización del ser humano, amor, entrega, sacrificio..., ya sé que los abuelos somos el refugio, un tanto egoísta, de los caprichos de nuestros nietos pero es tan dulce el sentirse cerca de su cariño que solo pido a la vida el poder caminar mis últimos pasos sintiendo sus pequeñas manos entre las mías...  

sábado, 25 de enero de 2014

En la noche...

Fuego..., tu violenta llamarada busca el cielo a la luz de las estrellas, te sientes libre en tu poder, nos dejas el calor de tu luz en el ascenso alocado de las pavesas que el suave viento esparce como lluvia sobre quienes te acompañamos en el ritual de tu adiós, nos agrada sentirnos junto a tu efímera vida preñada de tantos recuerdos... y también deseos de un próximo año, nuevas vidas en tu entorno... la ropa impregnada de tu humo y del aroma de las parrillas posadas en tus brasas, olores que saben a familia, saben a una tradición a la que dieron forma varias generaciones y me emociona simplemente el estar allí donde aún escucho las risas, bromas, conversaciones distendidas a lo largo de tantos años, tantas cosas que solo pertenecen al recuerdo más íntimo y sin embargo cada año descubrimos algo nuevo, nuevas almas que lo hacen diferente al anterior..., tus llamas nos hablan de un año más, de esperanza y también del recuerdo de quienes dejaron su lugar en lejanas noches, en antiguas llamas...

martes, 14 de enero de 2014

Gritos en silencio.

Aire..., sé que no hablas de volatilidad y menos de aspectos fútiles, es la constante de una permanente búsqueda de libertad y esa creciente ansia de volar nos produce el encadenamiento a la realidad que pisamos, pretendemos huir pero siempre con la mirada hacia atrás esperando una llamada de necesidad y que solo el afecto nos la envía ó al menos creemos oír..., casi todos pretendimos continuar en nuevas vidas y siempre el invisible muro nos hacía desistir, romper acaso ¿nuestras vidas pasadas?, dejar de oír aquello que conforma nuestras vidas, cambiar nuestro latido y aprender a caminar nuevos caminos... y miramos atrás...,seguimos en nuestro viejo camino donde cada ser que lo conforma nos es familiar, no es tiempo de rupturas sino de valorar lo que somos, busco tantas muletas espirituales y siempre recalo en las palabras de un anciano fraile que se interesó en saber el que buscaba en el templo, ¡busco a Dios!, su simple respuesta fue acompañarme al pequeño dispensario donde atendían a quienes carecían de casi todo..., aire, acaso la libertad solo sea el poder mirar a los ojos y saber apreciar el silencio de una sonrisa...

viernes, 10 de enero de 2014

En la niebla.

Tras la ventana asoma el blanco y ligero resplandor, la magia de la intensa niebla invita a viajar sin un rumbo concreto, solo la grata sensación de aislamiento acaso invadida por fugaces luces que me rebasan mientras las notas de una balada me hacen soñar en otro lugar, en otro tiempo... suenan sus notas..., la plácida sensación de ausencia me lleva a lugares no previstos, la radio canta la hora cual cruel despertador y sé que tengo que volver, el desconocido giro me encamina en un retorno que acaso no deseo, la niebla me envuelve como una caricia que relaja mi mente tanto que no pienso en un regreso, solo, solo yo en mi voluntario abandono..., el gran cartel me sorprende cual gigante salido de la nada, es el final de mi dulce ausencia y vuelvo a lo conocido con una sonrisa, en la puerta de mi casa reconozco a la pequeña bola peluda que espera pacientemente mi regreso, solo espera una caricia...