miércoles, 24 de junio de 2020

Esto es lo que hay...



Ya hemos pasado un tiempo importante con esto del dichoso virus como para ir teniendo unas pocas ideas lo suficientemente claras, escuchado tantas opiniones para llegar a la conclusión de que esto habrá terminado cuando acabe su actividad ¡genial!, entiendo que prácticamente nadie tiene ni puta idea, de lo contrario habría que darle el Nobel ya. Percibo que detrás del verdadero peligro del virus se esconde la temible figura de una quiebra económica  que solo una drástica intervención internacional nos salvará de nuestros maravillosos e ineptos políticos solo interesados en su promoción personal y económica. Vería aceptable el que nos impusieran unas normas básicas como reducción de la administración y de los emolumentos que perciben, aquí el más tonto aguanta cuatro días en el chollo y tiene la vida más que garantizada, bien sea en Galapagar ó Cádiz. No tengo ni idea de como acabará todo esto, la manipulación , contradicciones informativas, y sobre todo datos estadísticos..., solo sé que la miseria social de este país me produce náuseas como el asunto de muchas residencias de ancianos sin control y lo que es peor con la complicidad de quienes acaso,¿ignoraban?, no solo la administración sino muchos familiares, ¡pobres ancianos! toda una vida de lucha para morir de una manera tan indeseada. Espero y deseo que como siempre, después de la tormenta asoma el arco iris..., ¡país, país!

jueves, 18 de junio de 2020

Espero...

                                
A solas. Siento lo que pienso, soy lo que pienso y no puedo vivir de espaldas a mi verdadero yo sabiendo de mi engaño, acéptame como soy o déjame seguir buscándote más allá de mi verdad, toma mi mano y sálvame, la vida se escapa entre el día y la noche, mi tiempo ya vivido solo son recuerdos de un dulce atardecer en la indolencia de un esperar un futuro sin definir..., a solas se hace el último viaje, sin temor, sin esperanza, solo camino de la eterna libertad, llegar a ese día sintiendo latir la vida me hace feliz ¿quién puso la edad? acaso para acotar nuestra vida sobre un papel, sabiendo que siento la vida simplemente dame tu mano y caminemos hacia donde el sol amanece con la promesa de un nuevo día, siento el intimo grito de un poema que dice mi verdad, mis miedos frente a la pérdida de seres que fueron parte de mi.

.... y cuando sepa dónde la perdí,
quiero ofrecerte mi destierro, lo que vale
tanto como la vida para mí, que es su sentido.
Y entonces, triste, pero firme,
perdóname, te ofreceré una vida
ya sin demonios ni alucinaciones.    (José Hierro).                      

domingo, 7 de junio de 2020

Suena el viento.


Suena el vendaval como corceles desbocados precursores de la tormenta, sopla y agita cuando halla en su camino, me encanta sentirlo en mi piel como si retase a la formidable fuerza de la naturaleza..., me siento pequeño ante el, me golpea o abraza en un juego del que solo soy espectador y se que la vida es una continua esperanza de un cercano día al que acaso no vea su amanecer, mi vida, tu vida,¿acaso significa algo más que una fracción del eterno universo?, amo la vida y acepto lo que ella me ofrece cada día, ya no sufro por lo que ignoro ¿para qué?, amo la vida y disfruto lo que tengo, añoro tantas cosas que fueron muy importantes en mi vida desde el convencimiento de que no volverán..., truenos hondos aún lejanos, sonidos que trae el viento cabalgando sin límite por el ancho valle, ¡abrázame y llévame! para gritar mi alegría de vivir, para pedir una paz del mundo que los hombres hacemos casi imposible con nuestro egoísmo, sopla el viento y suena el trueno, solo siento una pequeña mano en la mía, siento una cálida lágrima en mi mejilla.., llueve.

martes, 2 de junio de 2020

Conversaciones.


Una sincera y abierta conversación. Cuando de forma espontánea se dan las circunstancias adecuadas a una simple conversación donde fluyen palabras que acomodan la atención de los interlocutores, entonces quedan agradables sensaciones, no por la transcendencia de lo hablado, acaso sean las formas y por supuesto el mutuo respeto incluso el tono de voz, realmente lo habitual son varias conversaciones alrededor de una mesa con lo que casi nadie escucha a nadie, solo la verborrea tratando de imponer la sinrazón contando lo que probablemente nadie escucha y poco o nada importa. Este retiro un tanto forzoso, me ha hecho valorar una aceptable conversación con personas ajenas a mi circulo familiar de la que guardo un agradable recuerdo, resulta curioso la de cosas que ahora valoro y que antes apenas percibía llevado de tantas cosas innecesarias que marcaban mi vida, me importas tu, no tu voz, apostura o cualquier ornato que acarreas; tu como persona me importas por ti mismo, todos tenemos unos valores que al mostrarlos nos hacen más generosos y nos proporcionan esa empatía capaz de aceptar a los demás tal y como son o somos, resulta sencillo, agradable, algo ha cambiado...