lunes, 31 de agosto de 2020

Solo por pensar.


Cabilándo a la sombra
Es curioso el que cualquier echo o circunstancia que afecta a una sociedad, altera la rutina social hasta el punto de descubrir aspectos de los que apenas nos percatábamos. Así sucede que ante la limitación de los desplazamientos a grandes distancias hayamos descubierto la belleza cercana de nuestro territorio, hemos encontrado personas encantadoras donde casi no existía relación alguna, también lo contrario ya que en la cercanía algunas resultan o resultamos inaguantables..., pero hay un dato que me ha sorprendido muy agradablemente y es el que la gran mayoría de participantes activas en estas redes locales son mujeres, esto ya apareció en los cursos impartidos a la tercera edad, la diferencia era abrumadora, el ambiente muy grato y la variedad de opiniones enriquecedora, me pregunto si seria posible retomar la citada actividad ya que con las adecuadas medidas de protección podríamos desarrollarlo..., se echa de menos la cálida relación humana que se producía, en fin, supongo y deseo, el que todo pasará y podremos retomar con ilusión todo aquello que añoramos con cariño.

martes, 25 de agosto de 2020

Un libro abierto...

Cuanto más busco aquello que deseo más vacío hallo mi interior, buscar sin saber donde ni desear lo que no poseo, quizás sea la incertidumbre de una vida que recorre viejos caminos que aún conservan las huellas de anteriores pasos, quizás solo sea una espiral que entretiene mis días en un intento de proteger mi estado emocional, quizás solo deseo caminar sin pretender llegar a ninguna meta definitiva, quizás..., mis pasos son pequeñas ilusiones que no llevan a ninguna parte, ya no, los días pasan como si tuviesen prisa por acabar un breve recorrido llamado vida, acaso la libertad definitiva se halla al final del camino..., en mis manos un libro abierto me ofrece todo su saber, sé que sus lineas describen vivencias que en un tiempo pasado fueron guías de mi camino y que hoy solo me genera preguntas sin respuestas, ¡que más da! ya solo queda el estallido emocional a través del grito íntimo de un poema, el vacío lanzado al viento acaso en un vano intento de escuchar, de escuchar, escuchar una vez más aquello que perdí muy atrás en el polvo de un largo camino que nunca más pisaré