Eterna promesa.

Breve como una eterna promesa, se ofrece como realidad de una nueva vida en un entorno más que conocido en el que cada día es una grata sorpresa llena de fuerza y belleza, cada día, cada día... breve será su presencia pero llenará otra vez mi deseo de algo que siempre imagino y que nunca llevo a cabo, acaso lamentaré el no hacer lo que siempre soñé. Un viejo rosal bajo mi ventana, un viejo rosal que año tras año me recuerda a quién un día te eligió por tu bella y breve flor, una esperanza en su aroma, una ilusión que me abandona, un sueño abandonado, un viejo lamento, hermosa flor de un hermoso rosal... breve como un suspiro acompañado de una lágrima. Primavera llena de vida y de ilusión.

Deseos de primavera.

Acaso sea esta joven primavera que me hace sentirme bien, ¡ me siento casi felíz !, y toda esta situación me provoca una cierta inquietud por todo aquello que me queda por hacer al menos en mis deseos de un cercano futuro..., soñar más allá de mis propias manos, sentir el latido de otras vidas..., soñar, sentir, tic-tac incansable del breve día que nos empuja hacia el mañana, descubrir como el bebé ya corretea con impulso propio, sentir el incipiente poder de quienes ayer eran pequeñas criaturas y hoy desbordan mis limitadas fuerzas, lo asumo con la alegría de verlos crecer paso a paso en un tiempo que les asoma día tras día a una realidad que cimenta sus futuras vidas..., ser espectador de un crecer sabiéndome tan cerca de un hipotético final, sin pesar ni dolor que evite lo inevitable ya que solo deseo vivir en la paz del cariño y me siento casi felíz, la vida es dura y al final descubres que pocas cosas son realmente importantes, la amistad y el respeto a la diversidad son los dos pilares que sustentan mi vida y ello genera el placer de sentir el cariño en una caricia, en una palabra, ¡ ser felíz !

Sueños de ayer.

Por una simple casualidad regresé allá donde mi mente comenzaba a llenarse de vivencias que en aquellos trece años de edad supusieron un borrón y cuenta nueva en mi joven vida, todo cambió hacia una formación personal en la que se forjaron unos valores amparados por la tutela familiar..., y hoy quiero saber más de aquellos compañeros que nos dijimos un hasta pronto cargado de promesas, de reencuentros, de aquello que sonaba bonito y que nunca cumplimos..., cincuenta y siete años atrás salimos a comernos el mundo, ahora todo aquello queda en una nebulosa lejana, muy lejana, tanto que duele el recuerdo por todo lo que dejamos atrás y sabiendo que ni puedo ni deseo el volver atrás acaso me sorprendo en una sonrisa valorando vivencias cargadas de urgencias por ¿llegar?..., rebasamos tantas metas sin valorar, inmersos en un vivir de miedos y esperanzas que nos hacian correr en pos de sueños que acaso no llegamos a soñar pero si fuimos felices en lo que la vida nos ofreció..., nos ofreció y lo tomamos con el cariño preciso que nos hizo seguir soñando hasta saber que la vida es una espiral caprichosa en torno a una ilusión. Veo amanecer y pienso en el nuevo día donde sentir la vida de hoy, tantos dias llenos de vida quedaron atrás y que solo forman parte de un ayer que no volverá, seguiré creyendo en un día felíz.

¡Hagamos primavera!.

Precioso día que invita a pasear sin rumbo alguno, solo perderse por el camino y saborear la nueva vida de esta primavera, calienta el sol y la mente bulle en deseos de vivir esta nueva esperanza sin querer saber el límite ¡que más dá!, no puedo ni quiero vivir inmerso en el posible sabor del mañana ni en el largo recuerdo que sustenta mi vida, sonrisas que ofrecer y recibir es mi ligero equipaje junto con la amistad de quienes me muestran su cariño, solo deseo el ser capaz de dar mi mano a quién precise de mi..., aprendi a mirar y apreciar lo que realmente importa en esta vida, dejé a un lado a quienes creían ser el centro de la vida creada en su torturada mente y que solo insolidaridad y cierto grado de estupidez generaban ¡pobres!, primavera preñada de esperanza ofrecida en mil formas llenando de vida la naturaleza, nuevas flores, nuevos trinos, nueva vida, renacemos en una nueva vitalidad limitada en nuestra edad, de este modo, uno se siente capaz de vivir  personalmente experiencias, simplemente porque que quiere y no porque debe. Es un día lleno de vacios y que la vida nos ofrece poderlos llenar.