lunes, 10 de septiembre de 2012

Un aniversario.

Los pasos vuelven a pisar las viejas huellas que el polvoriento camino conserva como un eterno recuerdo de nuestro pasado, las huellas resultan conocidas, los motivos son otros, distintos, incluso tienen otro ritmo..., el tiempo como un suave bálsamo suaviza aquello que solo causó dolor..., el tiempo, dulce sedimento del día a día en el que caminamos, reímos, lloramos, al final siempre existe la eterna primavera, siempre hallamos motivos que dan algún sentido a nuestro eterno caminar. Caminamos, miramos el eterno azul del cielo en el que quizás buscamos un futuro ignoto en el que acomodar nuestros anhelos más caros, caminamos sabiendo que la única verdad son los hechos que dejamos atrás y nuestras preguntas siempre las dirigimos hacia el eterno querer saber de nuestras vidas..., ¿acaso nuestras vidas las hemos elegido?, verdad es la muerte final como afirmación de que esta vida existe..., en el silencioso espacio suena la dulce melancolía de una querida voz que al ritmo de una balada añora sentimientos profundos y queridos, un nueve de septiembre...

viernes, 7 de septiembre de 2012

Dime...

Solamente dime aquello que tus ojos me gritan, dime tan solo la pequeña parte que intuyo en tu negra mirada... dime, ya no preciso jugar a las adivinanzas pues sé casi todas las respuestas pero tú dime, ya no me basta con creer, con saber... necesito oírte y necesito ver el movimiento de tus labios modulando tus palabras, necesito sentirte cerca, cerca para sentir el latido de tu corazón... tus palabras... torrente de cariño sincero repartido a manos llenas, tú dime sin temor alguno al vacío del afecto, no existe el vacío, solo existen las ausencias que dejan tantos recuerdos como si fuesen una vida paralela a lo cotidiano.
Tú dime..., un simple abrazo y un te quiero, mirarme en la inmensidad de tus ojos y decirte te quiero, seguir soñando con el último sabor de tus labios, seguir soñando, soñando..., ves mis silenciosas lágrimas y me dices un te quiero, lloro por que te quiero, se que me quieres pero tú dime aquello que tus ojos me gritan...

martes, 4 de septiembre de 2012

Estados de ánimo.

A veces me siento como un águila en el aire.
Unas veces me siento como pobre colina y otras como montaña de cumbres repetidas.
Unas veces me siento como un acantilado y en otras como un cielo azul pero lejano.
A veces uno es manantial entre rocas y otras veces un árbol con las últimas hojas.
Hoy me siento apenas como laguna insomne, con un embarcadero ya sin embarcaciones, una laguna verde, inmóvil y paciente, conforme con sus algas, sus musgos y sus peces.
Sereno en mi confianza, confiado en que una tarde te acerques y te mires, te mires al mirarme, sin un temblor de más me abrazo a tus ausencias que asisten y me asisten, estoy lleno de sombras, de noches y deseos, de risas y de alguna maldición, las paredes se van y queda la noche, las nostalgias se van y no queda nada... es una soledad tan desolada.