sábado, 19 de junio de 2021

Familia, nietos

 Ya terminó el curso escolar y como abuelo tengo una agradable sensación de que mis pequeños han superado con creces sus respectivos cursos, verlos crecer en todos sus  aspectos personales me hace feliz y aún cuando siempre creeré que son mis niños a los que proteger, siempre sabré que realmente son el aliciente de mi ancianidad, no imagino mi vida sin su presencia, de su cariño, habría muchos vacíos y silencios, recuerdo unos versos:

-Quédate en mi memoria y en mis recuerdos,
quédate allí, donde nadie te toque,
donde cada vez que te busque pueda encontrarte ... 
 
Recuerdos, vivencias que van quedando atrás conformando unas vidas que de manera inexorable van creciendo, vidas en la aspiro a permanecer en un pequeño rincón de su amor,  
la vida ya larga, me ha mostrado tantos caminos como ilusiones truncadas y aún sabiendo de la alegría de reunir tres generaciones en esta algarabía familiar, hay momentos que duele el saber de un final inevitable. Disfruto todo lo posible de la verdad contenida en la familia, todos tan distintos y tan unidos en un caminar la vida sin perder el mismo horizonte.

domingo, 13 de junio de 2021

Caminando hacia un futuro

 No es una foto más, mi nieto menor y yo caminamos de su mano hacia un destino en que él guía nuestros pasos, el pasado y el futuro en una emotiva  conversación en la que me ofrecía su apoyo llevado de un cariño que me emocionó, difícil el contar tu ausencia querida Carmen y menos el explicar mi  lógico adiós a una vida a la que me aferro con el cariño de quienes están muy cerca de mi, escaso futuro para lo que aún desearía saber de vuestra vida, verlos crecer y sentir su cariño entre mis abrazos, prefiero no soñar y vivir la realidad de hoy, latir en sus palabras, sufrir en sus pequeñas penas, sentirme vivo en un paso de abuelo, no preciso correr, sus pequeñas manos guían mis pasos y acaso secan una ligera lágrima que escondo tras una caricia... y sueño un futuro que solo ellos podrán vivir, en la esperanza de un recuerdo cariñoso hacia quienes tuvimos la alegría de compartir su infancia.