jueves, 13 de mayo de 2010

Al final.

Si de alguna manera la vida se olvidara de que soy solamente una de sus marionetas de trapo solo le pediría que me regalara unos instantes de vida, no diría todo lo que pienso pero en definitiva, pensaría todo lo que digo y daría importancia a las cosas no por lo que valen, sino por lo que significan, dormiría poco y soñaría mucho, andaría cuando los demás se detienen, despertaría cuando los demás duermen, escucharía mientras los demás hablan..., si yo tuviera un poco de vida no dejaría pasar un solo día sin decirle a la gente que quiero que la quiero..., convencería a cada mujer que ella es mi favorita y viviría enamorado del amor, les explicaría a los hombres cuan equivocados están cuando piensan que dejan de madurar cuando envejecen, sin saber que realmente envejecen cuando dejan de madurar.
Al final, siempre al final es cuando la razón se impone al deseo y descubrimos el olor de la mañana, el cielo de colores con alas y canciones, la dulce pereza de contemplar el vuelo de un pajarillo, descubrir las cosas simples como decir hola y sonreír..., al final la vida nos muestra aquello que no supimos vivir...

No hay comentarios: