domingo, 1 de junio de 2014

¡Mi pobre país!.

Y qué somos sino un cúmulo de miedos aderezados con toques de esperanza, ya pasaron nuestras esperanzas por las urnas y tuvimos la alegría, la sensación de que algo se ha movido en las entrañas del poder, tanta ineptitud y prepotencia de quienes decían cuidar de este país se ha visto resquebrajada por la indiferencia del ciudadano que cada día tiene menos temor y cada día menos que perder, no hay que temer los profundos cambios que nuestra sociedad precisa, basta de actitudes llenas d conformismo que solo engordan al poder, quizás hoy no es un buen día, acaso mi hoy está lleno de quizás, demasiadas, y sin una veraz respuesta, demasiados silencios..., quizás no es bueno mezclar los sinceros sentimientos que solo me causan pesar, hoy no es un buen día, hasta aquí llego huyendo del saber que sé de mi rebeldía íntima, solo que hay días que bajo la guardia  y siento el cansancio del camino, me hastían los salvadores de patrias, sinvergüenzas que pueblan sin pudor nuestra libertad y dignidad ciudadana, hay días que siento vergüenza de que eludan simplemente citar a nuestro país por su nombre, siento vergüenza de la violencia gratuita y cobarde venga de donde venga, siento vergüenza de tanto egoísmo que no sabe de solidaridad, siento vergüenza de que aún estemos inmersos en rojos y azules, izquierdas y derechas..., siento vergüenza de que el coste mensual de un coche oficial suponga la comida escolar de cien niños..., siento pena, mucha pena. 

1 comentario:

AIRE dijo...

Tu vehemencia es reflejo del clamor popular.
El poder siempre aprovecha la indiferencia y dejadez de los ciudadanos provocada por la "perversa" gestión de este país. Agotados por un esfuerzo cada día mayor, ven con rabia que todo sigue igual. "Nada es igual para todos".
Los "quizás" siempre se simplifican. Y un mal día deja paso a otro mejor.
Leerte siempre ayuda. Gracias por escribir. Sigue ahí, por favor.