domingo, 8 de septiembre de 2013

Un nueve de septiembre...

Ayer te besé en los labios. Te besé en los labios, densos rojos. Fue un beso tan corto que duro más que un relámpago, que un milagro más. El tiempo después de dártelo no lo quise para nada ya, para nada, lo había querido antes, se empezó, se acabó en el.
Hoy estoy besando un beso, estoy solo con mis labios, los pongo no en tu boca, no, ya no... ¿Adonde se me ha escapado?, los pongo en el beso que te dí ayer en las bocas juntas del beso que se besaron. Y dura este beso más que el silencio, que la luz porqué  ya no es una carne ni una boca lo que beso, que se escapa, que me huye. No, te estoy besando más lejos más allá de nosotros...

No hay comentarios: