viernes, 1 de abril de 2011

Eterno juego.

No sé pensar en las mujeres sin sentir frío, es como intentar coger agua con una sola mano: cuando se abre la mano ya no hay agua, tan solo queda el silencio de haber tenido lo que nunca fue tuyo..., no sé pensar en la vida sin sentir el frío certero de que al abrir las manos verlas vacías de todo aquello que perdimos en el goteo del día a día... siempre añorando lo que sin conocer la causa fuimos perdiendo en cada paso y siempre olvidando que cada uno de nuestros pasos nos acerca a una nueva meta llena de ilusión, sueños que nos hacen sentir un abrazo deseado en la caricia desnuda, sin miedos, solo sentimos el ahora como sentimos el agua fresca entre nuestros dedos y sin duda nos deja el placer del momento... vuelvo a recordar el instante y mis manos están secas, secas y llenas de sentimientos pasados, también de viejos temores a perder lo que se quiso... dejo correr el agua entre mis manos y bajo la piel siento el vital latido deseoso de sentir el frío de un nuevo paso que me haga soñar sin dejar de ser yo en mi camino, mira mis manos en las que traigo viejas señales, son mis manos de ahora no las de antes, doy lo que puedo y no tengo vergüenza de mis sentimientos... la nueva primavera nos ofrece el calor que nos haga sentir el frío del arroyo entre los dedos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

¿Acaso has pensado en no lamentar el agua que escapa de tus manos?, aún te queda el frescor y la humedad entre tus dedos. ¿Quieres beber?.
Un cariñoso y fru-fru abrazo.