viernes, 6 de febrero de 2009

En la dulce espera.

Te acaricias la piel en el deseo de una pequeña respuesta, te acaricias y sientes dentro de ti, muestras tu piel en un intento vano de mostrarlo, te acaricias la piel como solo tú sabes hacerlo, suave caricia, apenas tus manos recorren la piel..., solo acaricias, suaves y lentos movimientos en torno a él, y sientes... sientes lo que solo tu puedes sentir, y el siente lo que solo el puede sentir, sentir cada día, cada momento con mayor intensidad, hambriento de tus caricias..., te imagino, te veo sin mirarte, te oigo sin oírte y siento envidia de quién te acaricia, de quién te susurra, de quién te cuida, de quién te lleva, de quién te alimenta... siento envidia de quién te protege, solo ella cuida de ti, solo ella es tu madre, solo ella sabe de ti, la condicionas con tus suaves protestas en forma de dulces movimientos que solo tu madre comprende..., nacerás con dolor y tus primeros llantos se acallarán con primeros besos y la primera caricia de tus labios será en el pecho de tu madre..., habrás nacido y tu madre te acunara en sus brazos...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Entiendo que tu linea de escritos son realmente vivencias sentidas, dificilmente se puede mantener una linea sin verdad de pensamiento.
Formas parte de mis hábitos diarios
y te animo a seguir.
Un sincero abrazo.

vuelo corto dijo...

Te agradezco el interés mostrado a estas lineas que solo son sentires y recuerdos escritos a mi aire...
Un cordial saludo.