martes, 28 de julio de 2020

Tiempo para pensar...

Reflexiones en la pandémia.
Cuantas veces el exceso de actividad solo encubre una desesperada huida de una soledad que nos aterra, una soledad provocada por una incapacidad de ser generosos ya que solo nos amamos a nosotros mismos..., ¡pobres diablos!, nos agotamos en teoría siempre maquinando el que hacer, siempre arrastrando a quienes aún nos quieren sin darnos cuenta que son ellos quienes nos sustentan y seguimos creyendo que somos la nata de todas cremas hasta que un buen día descubrimos que todo sigue igual sin nuestra permanente presencia ¡pobres!, de que sirve el poseer si no sabemos vivir en el respeto y amor hacia quienes nos rodean..., entonces comienzan las lacerantes dentelladas de una soledad que nos enseña en el día a día la importancia de amar y ser amados. aprendemos que vivir no es correr hacia el lugar que nos protejera, aprendemos que ese lugar no  existe y es en ese momento cuando miramos a nuestro interior y sentimos el pánico de un eco en el vacío de nuestra alma... quizás esta situación sanitaria nos haga más humanos y más conocedores de donde empieza nuestra verdadera libertad, yo al menos lucho por mi íntima libertad..., ¡paz y amor!.

No hay comentarios: