domingo, 21 de noviembre de 2010

En silencio.

Silencio, solo silencio más allá de los sonidos habituales, solo silencio frente a mis ojos cerrados y tras ellos como una imparable sucesión de imágenes, sonidos, vivencias, tan presentes como lejanas del hoy... es mi pequeño refugio donde las verdades de la vida afloran sin dolor y soy capaz de sonreír ante los recuerdos en que a la vida le exigiamos una realidad por la que justificar nuestro esfuerzo y la vida jugaba con nosotros haciéndonos creer que todos los días eran luminosos y que el camino estaba libre a nuestro paso..., la vida nos acompaña sujetando nuestros débiles hilos y en esa bendita ignorancia es posible el caminar sin percibir las trampas del camino, a nuestro paso se reducen los deseos mas queridos y se van apagando frente a nuestra obligada resignación, quedan los ojos secos, quedan los puños cerrados y la boca sin un sonido... queda el cariño de quienes quedan y solo el ser feliz puedo ofrecerles, solo que hay días en que vivo del recuerdo y simplemente pido a la vida que no me engañe más, no pido un largo camino, solo quiero ver el sol de cada mañana y oír los queridos sonidos que dan sentido a mi vida... solo que hay días...

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