martes, 2 de agosto de 2016

Mañana.

Afortunadamente todavía me sorprende la vida en la espera cargada de creciente ilusión más allá de la rutina cotidiana, crece el afecto en la espera puesto que poco más puedo aportar ante el repetido y a la vez único milagro de la vida, cuanto se añora a esos "locos enanos" en sus idas y venidas, todos iguales y a la vez tan diferentes..., quisiera tener el tiempo en mis manos para poder ver sus vidas, quisiera tener su cariño eternamente para que nadie les contase "erase  una vez un abuelo...", quisiera que mis manos parasen mi mundo o acaso renacer en viento para envolverlos en suaves ráfagas de cariño, quisiera y acaso vivo en el deseo de que la ilusión se realice, la espera produce y da felicidad ya que todo es como soñamos o al menos luchamos por hacer de la ilusión una realidad, me siento feliz en medio de la verdad de mi vida, espero el futuro caminando hacia el en un intento de creerlo más cercano y sin embargo la vida transcurre lentamente dándonos la ocasión de aprender a conocerla en sus variadas facetas, acaso sabemos que es la vida, no la que nos venden sino la tuya, la mía..., la vida solo nos enseña el siguiente paso y todo lo demás es la ilusión de querer vivir nuestro sueño, quizás solo sea la zanahoria de nuestro camino pero seguimos soñando y ello es nuestra fuerza para seguir andando.

1 comentario:

AIRE dijo...

"Acaso renacer en viento"... ¿Por qué no pensar que sea así? Quizá por eso me resulte tan estimulante desde siempre.
Alguien escribió que las ilusiones son lo mejor de la vida ¿cómo podríamos vivir sin ellas?
Un abrazo.